Para: Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta
Dejen de repartir publicidad y propaganda en papel en la vía pública y en cualquier otro ámbito
Vivo en una ciudad donde cada día recibo en mano no menos de cinco publicidades en papel, de cualquier tipo de comercio, por parte de empleados que tienen que estar en la calle, haciendo un trabajo poco digno, donde además de tener que lidiar con transeúntes que actúan indiferentemente, entre otras cosas, obstruyen el paso de la gente en la vía pública. Basta de publicidades en papel.
¿Por qué es importante?
La cantidad de papel que se reparte de esta manera día a día, y la que no -que se pega en postes, se cuelga en exceso de otros lados y se tira- es excesiva, unas cuantas toneladas de residuos de celulosa que podrían ser muy útiles para otras causas: libros, cuadernos, o incluso podrían no haber salido nunca de sus propios bosques de origen.
El hecho más alarmante sucede al anochecer, cuando uno llega a su casa y ve cantidades exacerbadas de papeles, de cualquier tamaño y color, incluso a veces agrupados de a decenas o cientos, tirados en la calle, que terminan desperdigados por todos lados. No es ni bonito estéticamente, ni bueno, para nada, ni para nadie. Por eso inicio esta petición, quiero que se llegue a un acuerdo cuyo objetivo sea terminar con la distribución de propaganda o publicidad en papel en la vía pública, ya sea a mano, pegada, anexada, o de cualquier otra forma que genere tales residuos y malestar como el dicho previamente.
Esto nos ayuda a todos. Menos papel circulando en la calle, menos obstrucción en la vía pública, menos basura. Me gustaría también que los empleados que se dedican a esto puedan luchar por su derecho al trabajo y exigir un empleo equitativo al que están haciendo, y dejen dignamente de trabajar de esa forma.
Podemos terminar con la hipocresía de la "ciudad verde" si empezamos a generar un poco de conciencia y buscar algo de acción por parte del ciudadano, el cual quiero que se sume a esta petición.
A partir de esto, el programa de reciclaje y separación de residuos, que tan buena iniciativa está teniendo, puede seguir y mejorarse. Entre todos, podemos seguir motivando la ecología, y por algo se empieza. Las soluciones muchas son convenciones sociales, y así, podemos construir un país mejor.
Es fundamental la preservación de nuestro lugar, el cuidado de nuestras ciudades, del legado que nuestros descendientes van a recibir. Un lugar limpio y agradable no sólo nos beneficia a todos, también beneficia al planeta en el que vivimos.
La idea es que se empiece con esta propuesta en la Ciudad de Buenos Aires, para luego expandirse más y más. Sí se puede!
