NO a la incineración - Chile

En respuesta a esta necesidad, la Unión Ciudadana contra la Incineración y por Basura Cero se forma como una coalición cívica compuesta por organizaciones de la sociedad civil, individuos, alianzas, recicladores y empresas orientadas al bien común, con el objetivo de aportar con su visión e información sobre las tecnologías inadecuadas de gestión de los residuos que se están impulsando hoy en el país, así como con información y experiencia en relación a la estrategia basura cero.

Chile tiene una oportunidad única de convertirse en un ejemplo de manejo sustentable de los residuos a nivel regional, al contar con una política de Residuos que contempla una adecuada jerarquía de los mismos, una Ley Marco para la Gestión de Residuos la Responsabilidad Extendida del Productor y Fomento al Reciclaje, así como iniciativas de reducción como la reciente ley que prohíbe las bolsas plásticas.

Hemos sido testigos del conjunto de iniciativas coordinadas en distintos puntos del país para promover e introducir la incineración de los residuos como una forma de gestión deseable y esperada en el país. En realidad, la incineración de residuos se opone a cada uno de los principios que sostienen las bases de las políticas públicas impulsadas en torno a esta materia hasta hoy en el país, así como a los de la economía circular:

• Es una tecnología incompatible con el manejo sustentable de los residuos porque no está inspirada en una economía que cuide los recursos y valore el bienestar de las comunidades.

• La incineración de residuos para energía, promovida por la industria como waste to energy - (WTE) es una promesa falsa, porque se conserva mucho más energía con el reciclaje y la reducción.

• Es una de las formas más silenciosas y perversas de contaminación porque genera emisiones que perjudican gravemente la salud, el ambiente y agrava la crisis climática.

• Es una tecnología carísima (siempre del orden de cientos de millones de dólares) que obliga a mantener el mismo sistema de gestión por 30 años o más (duración de los contratos), y los municipios chilenos difícilmente tendrían la capacidad de darle manutención a estos sistemas.

• Compite de manera directa contra el reciclaje, poniendo en serio riesgo las fuentes de trabajo de miles de recicladores de base en la medida que deban competir con una tecnología que necesita alimentarse de manera permanente de materiales con alto poder calorífico, entre los que se encuentran precisamente los que tienen como destino el mercado del reciclado, tales como papeles y cartones, residuos que mayormente comercializan los recicladores de base. Además, requiere de muy poco personal, altamente calificado.

Desde cada uno de nuestros ámbitos de acción, así como de manera colectiva, promovemos con fuerza las soluciones de Basura Cero para enfrentar el desafío que nos impone el manejo de los residuos en el país. Estas soluciones son parte de una red más amplia de decisiones sobre la salud, modos de consumo, trabajo, decisiones políticas y gobernanza, que requieren la participación y el compromiso de todos y todas, y que se conectan con el derecho a un medio ambiente sano y a una vida digna, en el largo plazo, sobre el planeta.

Los principios de Basura Cero se orientan a soluciones a corto, mediano y largo plazo en cuanto a la gestión de los residuos, al cumplir con los principios fundamentales de minimización, reducción, rediseño y respeto a la naturaleza y sus ciclos:

• Buscamos darle un efectivo camino a los ciudadanos cada vez más interesados en separar sus residuos en origen, y quienes ven limitada hoy esta posibilidad de participación en la solución.

• Promovemos una nueva forma de ver los residuos y recursos más allá de las 3R (reducir, reutilizar y reciclar), comprendiendo la necesidad de reducir el consumo de recursos naturales, materiales y energía, así como combatir el consumismo y las lógicas industriales de obsolescencia programada y percibida.

• Promovemos programas ambientales a partir de comunidades organizadas e identificadas con las necesidades y vocaciones de sus territorios.

• Promovemos la educación asociada a la problemática de los residuos y su manejo sustentable como eje transversal de la gestión de los residuos

• Promovemos el fortalecimiento del rol de los Municipios para el logro de una gestión y manejo sostenibles de los residuos sólidos a nivel local.

• Promovemos la responsabilidad en el sector productivo, la que puede abrir oportunidades para la creación de empleos y diseños sostenibles de productos y servicios, en base a regulaciones públicas y alianzas entre actores con objetivos comunes.

• Promovemos el reconocimiento, inclusión y formalización de los recicladores de base como agentes fundamentales en la recuperación de los residuos.

• Promovemos incentivos fiscales y cobro por retiro de residuos como elementos clave para impulsar el cambio cultural necesario para comprometer a la ciudadanía en este proceso.

• Promovemos avanzar en políticas públicas y planes de acción orientados a la prevención.

• Demandamos el desincentivo a la disposición final de residuos sólidos domiciliarios y promover la separación en origen para el óptimo aprovechamiento de los residuos como recursos que pueden ser reutilizados y reciclados.

Con la misma fuerza con la que nos oponemos a la incineración como opción de manejo de los residuos para el país, nos ponemos al servicio de todos los planes de acción que tiendan a basura cero y su implicancia positiva para nuestra salud, el ambiente y la sostenibilidad de nuestras comunidades, ciudades y territorios.